Todo negocio requiere de su formación tanto especializada como general. En ocasiones la hostelería ha sido la cuna de aquellos que no han sabido o no han querido ampliar sus conocimientos y han optado por un camino de trabajo duro sin formar.
Ha llegado el momento de especializar a sus equipos de trabajo, formar auténticos profesionales de sus productos y servicios. Toda la gestión de un local de hostelería implica diferentes ramas especializadas en las que profundizar y mejorar el rendimiento:
- Compras y logística: optimizar los stocks, reducir las mermas, organizar almacen, controlar mercancía, negociar con proveedores
- Ventas: técnicas de venta y comunicación, venta complementaria y suplementaria, argumentación y tratamiento de objeciones
- Recursos humanos: selección de personal, organización de turnos, comunicación interna
- Manipulación de alimentos: cuidados especiales, utilización de herramientas y maquinaria
En general cualquiera de los apartados que indicamos suele ser uno de los ejes en la gestión y operativa de un local de hostelería. Solo cuando el propietario del negocio vive las 24h en su negocio y trabaja todos los días sobre el, es cuando vemos que estos errores se reducen sensiblemente (a cambio de un sin vivir del propietario en el local).
La diferencia entre un equipo de profesionales formado y organizado, a un equipo de trabajadores como simples empleados hace que la cuenta de explotación de su negocio varíe hasta un 30% en ventas y en muchos casos es la diferencia entre ganar y perder dinero.